Lisboa, la encantadora capital de Portugal, te espera con una rica historia, una vibrante cultura y una belleza natural cautivadora. Sus icónicos monumentos, como la Torre de Belém y el Monasterio de los Jerónimos, te transportarán a través del tiempo. El laberíntico barrio de Alfama te cautivará con sus calles empedradas, sus casas coloridas y sus fados melancólicos. Si preferís la naturaleza, el Parque das Nações te ofrece espacios verdes y modernos, mientras que las playas cercanas a Lisboa te invitan a relajarte bajo el sol. La mejor forma de llegar es en avión, y existen varias opciones para encontrar vuelos económicos.
La duración promedio de un vuelo directo Ginebra-Lisboa es de aproximadamente 2 horas y 45 minutos. Sin embargo, este tiempo puede variar según las condiciones climáticas o el tipo de aeronave. TAP Portugal y EasyJet ofrecen vuelos directos con una frecuencia diaria o varias veces por semana, y es raro tener que hacer escala. Si querés obtener las mejores ofertas, los meses más baratos para volar suelen ser noviembre y enero. Lo ideal es reservar con antelación para aprovechar mejor las promociones.
Si bien los vuelos directos son la forma más rápida y eficiente, también existen rutas alternativas con escalas en ciudades como Madrid, París o Amsterdam. Estas escalas pueden extender el tiempo de viaje, pero a veces resultan en precios más convenientes. La alta temporada turística en Lisboa coincide con los meses de verano (junio a agosto), debido al clima cálido y las vacaciones escolares. En esos meses, es más probable encontrar precios más altos. Por el contrario, la temporada baja se encuentra durante los meses de invierno (noviembre a marzo), cuando el clima es más fresco y hay menos turistas.